Al entrar en la segunda mitad del año, me doy cuenta de que no hay razón para avergonzarse de nada del pasado, todo lo contrario, éste contiene la riqueza y la plenitud de la vida. Sin esta riqueza y esta plenitud, no estaría donde estoy ahora. Me recuerdo que cuando las personas nos aceptamos a nosotras mismas, nos sentimos realizadas y nos curamos.
LOUISE L. HAY julio 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario